Melina Passadore con un filtro amarillo. Qué amarillos fueron mis amaneceres últimamente, me despertaba a las siete de la tarde y veía el patio de mi casa amarillo/naranja. Como esta preciosa foto.
Por la muerte de mi viejo, en el trabajo pedí más días que los que me tenían que dar por ley. Es que soy un buen empleado, el primero en llegar, el último en irse.
Cambié algunas cosas, me puse lentes de contacto, me compré un televisor plasma de 39 pulgadas y empezé a tomar clases de tenis. El único deporte con clase.
Recibí llamados de algunas ex-chicas y las insulté horriblemente, les di la dirección de este blog para que vean lo que es una mujer a la que no le falta nada.
Mi único objetivo en la vida es compartir con ella aunque sean tres meses.
Haré lo que sea para lograrlo.
Lo que sea.